miércoles, 10 de febrero de 2010

Frases y Dichos

“El evangelismo nunca pareció ser un ‘problema’ en el Nuevo Testamento. Esto es, uno no encuentra a los apóstoles urgiendo, exhortando, reprendiendo, planificando y organizando estrategías, métodos o programas evangelísticos… ¡El evangelismo sucedía! Emanaba naturalmente de la comunidad de creyentes como la luz emana del sol; era automático, espontáneo, continuo y contagioso.” - Richard Halverson

"Determina practicar lo que lees. Los cristianos deberían ser Biblias andantes que viven las verdades allí escritas. La Palabra no es sólo guía para el conocimiento, sino también una guía para la obediencia. Una lectura santa de la Palabra de Dios produce que huyamos de los pecados y que practiquemos los deberes que se nos ordenan." -Thomas Watson

"La manera de alcanzar alivio y consuelo, no es negando, ocultando o extenuando nuestros pecados, sino confesándolos con toda su infamia y tratando el asunto con Dios, colocándonos justo donde la Palabra nos ubica." -William Jay

"El hombre no puede cubrir lo que Dios revelará." -Thomas Campbell

"Recuerda, no es la lectura apresurada de verdades santas y celestiales - sino la meditación seria en ellas lo que las hace dulces y provechosas para el alma. No es el mero toque que la abeja hace a una flor lo que produce la miel - sino su permanencia por más tiempo sobre la flor lo que le permite extraer el dulce. El cristiano más escogido, dulce, sabio y fuerte no será aquel que lee más, sino aquel que medita más." - Thomas Brooks

"Glorificación es el nombre bíblico que recibe el acto por el que Dios termina lo que comenzó al regenerarnos; esto es, nuestra reconstrucción moral y espiritual para que seamos perfecta y permanentemente conformados a Cristo. La glorificación es una obra de poder transformador, por medio de la cual Dios nos convierte por fin en criaturas sin pecado en un cuerpo inmortal."- J.I. Packer [Teología Concisa, 256]

“He escuchado bastante acerca de la evolución y el desarrollo, pero temo que si cualquiera de nosotros se desarrollara al máximo, aparte de la gracia de Dios, terminaría peor que cuando el desarrollo empezó.” - Charles Spurgeon

“Lloyd-Jones tenía la convicción que las Iglesias cometían un gran error cuando no esperaban que los niños estuvieran presentes durante un sermón… Los niños son tan capaces de estar conscientes de la presencia de Dios como los adultos, y bajo tal predicación pueden obtener impresiones que duren toda la vida. Aquel infante que escuchaba a Whitefield expresó: ‘él hace que Dios luzca grande’; consiguió algo que jamás olvidaría.” - Iain Murray [Lloyd-Jones—Mensaje de gracia , p.35]

“Si todos los pecados fuesen ahora públicamente castigados, se creería que ninguna cosa se reservaba para el último juicio; por otra parte, si Dios no castigase ningún pecado públicamente, se creería que ya no hay Providencia divina.”
- Agustín [Ciudad de Dios, Libro 1, Capítulo 8]

“¿Y por medio de quién nos conservó Dios su doctrina de vida, comprendida en la Ley y en los Profetas, para manifestarnos por ella a Jesucristo a su debido tiempo? Por los mayores enemigos de Cristo, que son los judíos; a los cuales, con gran razón, san Agustín llama libreros de la Iglesia cristiana, porque ellos nos han suministrado los libros que a ellos mismos no les sirven para nada.” - Juan Calvino [Instituciones de la Religión Cristiana , 1.8.10]

“Los sentimientos de confianza acerca de nuestra salvación necesitan ser probados antes de ser confiados.” - J. I. Packer

"Ver tu propia ignorancia y ceguera es el primer paso hacia tener el verdadero conocimiento." - Jonathan Edwards

"Parte de la bondad consiste en amar a las personas más de lo que se merecen." - Joseph Joubert

“El estudio de la historia es vital para la salud de la iglesia.” - Iain Murray [Héroes, p. xiii]

“La historia hace que un joven sea viejo, sin las arrugas ni las canas; dándole el privilegio de la experiencia de la edad sin las debilidades ni las inconveniencias de la misma. Sin la historia, el alma de un hombre queda ciega, viendo únicamente las cosas que casi tocan sus ojos.” - Thomas Fuller

“Si conocieran el valor de vuestras almas, la atrocidad del infierno, buscarían la salvación con la diligencia correspondiente. Sin embargo, cuándo fríamente busca aun el más ansioso a Cristo. Cuán raras veces oran, cuán pálidos son vuestros deseos, cuán raras veces lloran, claman o sudan con una intensa agonía. Oh, esforzaos a entrar.”
- Robert Murray M’Cheyne

“Entre los cuatro usos para los cuales la Escritura es útil, como se nos describe en 2 Timoteo 3:16, están redargüir y corregir. Una vez más, estos usos asumen que todavía tenemos pecado que necesita ser reprendido y corregido.”
- Jerry Bridges [Pecados Respetables, p.34]

“La historia demuestra que la declinación del fervor religioso ocurre más frecuentemente durante un período de paz y prosperidad que durante épocas de persecución y dificultad.”
- Simon J. Kistemaker [Hebreos, p. 28]

“La doctrina bíblica del pecado original se reduce a esto (según palabras de San Agustín): Somos libres para hacer lo que queramos, pero no somos libres para querer lo que debemos querer.”
- John Piper [Prueba y Observa, "Cuando el "querer" y el "deber" no coinciden, 29 de octubre 1998][Prueba y Observa, p.54]

“Dime cómo ora un hombre y te diré cuál es el estado de su alma. La oración es el pulso espiritual.” - J. C. Ryle

“El perdonar a otros no garantiza perdón para nosotros mismos, pero el no perdonar a otros demuestra que nosotros mismos no hemos sido perdonados.” - John Owen

La Biblia enseña de numerosas maneras que el pecado mismo es un juicio. En el libro de Romanos Pablo nos dice que la ira de Dios visita a los hombres entregándoles (Rom.1:18,24). Cuando Él los entrega a sus pasiones, corren de cabeza a más pecado, y ese estado de ceguera no sólo incurre en mayor juicio, sino que debe considerarse un juicio en sí mismo. Otro ejemplo lo podemos observar en el libro de Proverbios. ‘Fosa profunda es la boca de la mujer extraña; aquel contra el cual Jehová estuviere airado caerá en ella’ (22:14). Aquel que es sexualmente promiscuo piensa que con su conducta está escapando de Dios y de sus estándares, justo en el mismo momento en que está cayendo bajo Su juicio. En un frenesí de incredulidad, un hombre salta de un gran precipicio—la intención de Dios para Él puede verse en las rocas que se encuentran debajo. Pero por un breve período de tiempo el hombre piensa que está volando." - Douglas Wilson

"Lucha por nosotros, oh Dios, para que no nos deslicemos insensibles, ciegos e insensatos hacia emociones vanas y vacías." - John Piper

"En la más oscura noche del alma, los cristianos tienen algo a que aferrarse que Job nunca conoció. Conocemos a Cristo crucificado."
- Donald Carson

"Algunas veces pensamos que la oración es sencilla, pero no lo es. Los grandes santos de todos los tiempos han estado de acuerdo al decir que una
de las cosas más difíciles es aprender cómo orar. Si algún cristiano se ha estado sintiendo decaído porque él o ella encuentra la oración difícil, no deben desalentarse, porque es la experiencia común de los santos." - Martyn Lloyd-Jones [La Seguridad de la Salvación, p.16]

"Jesús dice: ‘He acabado la obra que me diste que hiciese’. Ya está hecha; está completa. Por tanto, nosotros predicamos una salvación completada.
No se nos ha dejado nada más para hacer, sino sólo recibirla; no hay nada que tengamos que añadirle; no hay buena obra ni ningún mérito que tengamos que proveer: todo está en Cristo, y solamente en Cristo." - Martyn Lloyd-Jones [La Seguridad de la Salvación, p.20]

"Muchos oran con sus labios por aquello por lo que sus corazones no sienten ningún deseo."
- Jonathan Edwards

“Cuando Dios rehusa corregir es porque Dios está resuelto a destruir. No hay un hombre que esté tan cerca del borde del abismo, tan cerca de las llamas, tan cerca del infierno, como aquel en quien Dios ni siquiera utilizará una vara.” - Thomas Brooks

“No tenemos razón para creer que nuestra religión es la religión de la Biblia, si ésta es aceptable al gusto de las mentes carnales.” - William Jay

“Es posible que un hombre puede estar fuera de Cristo hoy, y en Él mañana; pero es imposible que pueda estar en Él hoy, y fuera de Él mañana.”
- Augustus Toplady

“Aunque muchos dicen, erroneamente, que Dios aborrece el pecado pero ama al pecador, no es al pecado lo que Dios condena al infierno, sino al pecador” - Burk Parsons

“Las doctrinas de la gracia humillan al hombre sin degradarlo, y lo exaltan sin inflarlo.”
- Charles Hodge

“Si somos ortodoxos, entonces ‘pensamos rectamente’. Si ‘pensamos rectamente’ entonces pensamos en términos de la verdad. Si pensamos en términos de la verdad, pensamos en términos de Dios. Si pensamos en términos de Dios, entonces todo lo relacionamos con Dios y Dios con todo —somos gobernados en todas las áreas de la vida por la conciencia de nuestra dependencia de Dios y nuestra relación con Él. La piedad es precisamente eso. Dios está en todos nuestros pensamientos y estamos comprometidos con Él en todo. En una palabra, la verdad es según la piedad, y la piedad es según la verdad.” - John Murray

lunes, 8 de febrero de 2010

2° Parte - El derecho soberano de Dios en la elección

II Parte

En la primera parte de este estudio estábamos tratando con algunos argumentos que se levantan en contra de la doctrina de la elección, y que Pablo, adelantándose a esas objeciones, las responde otorgando claridad y certeza a favor de la soberanía de Dios en la elección.

Ahora continuaremos con esta enseñanza.

Rom 9:16-18

"Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra. De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece."

Otras de las objeciones a la soberanía de Dios en la elección, aparece en el verso 19 "Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién ha resistido a su voluntad?"

Sabemos que Dios no solo ha escogido tener misericordia de algunos, sino que también Dios, en su santísimo consejo, permite que los hombres sigan transitando en sus "propios caminos", y como un acto de juicio sobre ese camino, endurece sus corazones en su pecado, y por causa de sus pecados. Y la objeción que vemos en el verso 19 sería más o menos está: "Pablo, eso no es justo, ¿por qué Dios sigue inculpando? porque ¿quién ha resistido su voluntad?"

La primera respuesta a esa objeción es: "Acuérdate quién eres, y quién es Dios"
Versículo 20: "Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el vaso de barro al que lo formó: ¿Por qué me has hecho así?"

Una segunda respuesta a esa objeción, y mucho más decisiva sería la siguiente: "Recuerda los derechos de Dios."
Versículo 21 "¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra?"

Pablo nos está diciendo: "Déjame recordarte algo, por si quizás se te olvidó: Dios tiene derechos, y él hace lo que quiere
con su creación". Pablo utiliza esta ilustración del alfarero y el barro.
Por ejemplo: Puedes ir a la tienda y comprar barro y hacer algún florero elegante, ese es tu privilegio; puedes hacer algún bello adorno, ese es tu privilegio; o puedes hacer algún balde para darles de comer a los puercos, o para depositarles agua a los perros, puedes hacer como tú quieras. Tienes el derecho para hacer de la misma masa de barro algunos utensilios viles para deshonra y otros para honra y admiración. Y eso es lo que Pablo nos está diciendo en el verso 21. Hermanos, no nos olvidemos que Dios tiene todo el derecho de toda su creación. Dios puede hacer lo que desee de la masa de hombres caídos.

Ahora recuerden, mantengan esto en su mente, cuando la Biblia habla del tema de la elección, en estos contextos se habla de elección para salvación; así que lo que se implica aquí es que se está viendo al hombre como pecador, en su estado caído, un pecador en Adán; y la masa de la humanidad caída está en las manos de Dios. Esta masa merece la ira de Dios, y que es Su derecho hacer lo que quiera con ellos, según su soberana voluntad. Nadie puede detener la mano de Dios y decirle ¿qué estás haciendo?. Si Dios así lo desea, puede honrar a alguno con salvación eterna, para su propia gloria y la exaltación de su misericordia, y a otros deshonrarlos con condenación eterna; y eso sería un justo juicio por sus pecados. En todos los casos, Dios sería y seguiría siendo justísimo.

Y Pablo continúa indicándonos en los versículos del 22 al 24, que no solamente Dios tiene ese derecho, sino que Él también lo ejercita para su gloria. Romanos 9:22-23 "¿Y qué, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha paciencia los vasos de ira preparados para destrucción, y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria" Dios está manifestando su gloria.
Pablo nos dice que en la destrucción de los vasos de deshonra Dios magnifica su poder y su gloria en Su ira. Y en la salvación de los vasos de misercordia, Dios magnifica las riquezas de la gloria de su gracia. Y estos vasos, tanto los de deshonra como los de honra, Dios los preparó de antemano para Gloria.

Hemos examinado brevemente este pasaje.
Vimos el hecho de la ilustración por parte de Pablo de la soberanía de Dios en la elección con los ejemplos de Isaac e Ismael, y los de Jacob y Esaú. La base de la discriminación de Dios confirmada. Y las objeciones a la discriminación soberana de Dios anticipadas y respondidas por parte de Pablo.

¿Qué tiene que decirnos este pasaje a nosotros que somos hijos de Dios?

La enseñanza de este pasaje nos tiene que llenar de asombro, gratitud y humildad hacia Dios. Si nuestros corazones han sido llevados al arrepentimiento, si hemos sido traídos a ver el pecado por el Espíritu Santo y hemos huído hacia Cristo y estamos confiando en Él, si con gozo confesamos que para nosotros el morir es Cristo, es porque Dios tuvo misericordia de nuestra alma; es únicamente por eso. No es de aquel que quiere o del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. No fue porque usted o yo tuvimos suficiente sabiduría para tomar una decisión, sino que fue la decisión eterna de Dios, para incluirnos en su propósito.

Escribiendo sobre el tema de la elección, Pablo dice en Efesios 1:3-4a: "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, según nos escogió en él antes de la fundación del mundo" El corazón del apóstol Pablo está lleno de gratitud y alabanza por el solo hecho de pensar que él fue elegido para tener y ser depositario de la gracia de Dios; porque no hay ningún mérito en él.

Alguien puede decir: "Pero esta doctrina hace que Dios discrimine entre las personas" Yo te argumento que lo opuesto es la verdad. Porque todos están igualmente perdidos, todos son igualmente viles, todos merecen la ira; pero Dios, de su buen deseo, sin tomar en cuenta ningún mérito humano, sino por razones que están en Su propio corazón, Dios elige con soberanía; y maravilla de maravillas es que seamos el objeto de su misericordia.

Si algunos hombres fuesen inteligentes, nobles, y sabios; y otros fuesen necios, tontos, y de poca inteligencia; y Dios escogiera a los del primer grupo, entonces eso sería discriminación. Pero todos son iguales, estando en las mismas condiciones de pecado, entonces Dios, como alfarero, escoge de esa misma masa algunos para honra y otros para deshonra, en eso no hay discriminación alguna, sino una elección soberana.

Así que, afirmo y concluyo que esta doctrina de la elección soberana de Dios, debe llenar nuestros corazones de asombro, gratitud y alabanza a Dios.

A ti, Oh Dios, sea la gloria por siempre. Amén



miércoles, 3 de febrero de 2010

1° Parte - El derecho soberano de Dios en la elección


I Parte


Romanos 9:6-16
"No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de Israel son israelitas, ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo. Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama), se le dijo: El mayor servirá al menor. Como está escrito: A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí. ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? En ninguna manera. Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca. Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia."

Este es un pasaje que ha causado grandes conflictos en lo que a interpretación se refiere. Pero permíntanme aclararles algo antes de comenzar.
Es muy posible que algunos de mis lectores no estén de acuerdo con estas enseñanzas, y quiero asegurarles que yo no creo que, si una persona está en desacuerdo conmigo no es creyente. Yo reconozco que hay muchos hermanos piadosos que no están de acuerdo, lo reconozco. Pero al mismo tiempo, les pido que lean con mucha atención y con una mente libre de prejuicios a la Palabra de Dios. Porque lo que estoy tratando de hacer, es darle la interpretación más clara y directa que tiene este pasaje en sí mismo, y no alegorías; y les digo que, hubo una vez, en mi vida cristiana, en que rechacé y me opuse firmemente a las doctrinas que hoy estoy enseñando con mucha pasión y verdad. Pero Dios cambió mi corazón, y mi entendimiendo sobre estas cosas. Así que, lo único que les pido es que lean con mucha atención y justamente; y si después de todo, ustedes siguen en desacuerdo, los seguiré amando como mis hermanos en Cristo, y espero que ustedes también a mí.

Para empezar la enseñanza de este pasaje, tenemos en primer lugar, el hecho de la elección soberana de Dios ilustrada. Pablo utiliza dos casos específicos del Antiguo Pacto, en donde Dios utiliza su derecho soberano para discriminar o escoger en las dádivas de sus misericordias.

El primer caso al que se refiere Pablo es el de Isaac e Ismael. Versos del 6 al 9
"Ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo."
La promesa de Dios dada a Abraham aún estaba por cumplirse. Entonces, Abraham, viendo humanamente el problema de Sara, lo conversa con ella, y se les ocurre una idea de cómo ellos podían ayudar a Dios. Es por esto que Abraham conoció a la sierva de Sara, Agar. El resultado de esa unión fue Ismael, pero Dios rechazó a Ismael. Porque no era a través de Ismael que Dios se había propuesto llevar a cabo la promesa. La simiente sería de Isaac, no es Ismael. Ahora, debemos notar que Ismael era hijo de Abraham, era un hijo legítimo, sin embargo, fue rechazado por Dios.
Recuerden el contexto. El punto principal de Pablo en esta ilustración es que la descendencia natural o física no asegura la bendición de la salvación. Sino que los hijos de la promesa son los de la verdadera simiente espiritual de Abraham, y son hechos hijos de la promesa según la elección soberana de Dios. Pero el pasaje sigue hablándonos como si alguien objetase diciendo: pero espérate un momento, es muy obvio el porqué Dios escogió a Isaac y no a Ismael. La relación que Abraham tuvo con Agar no era de Dios. Fue el resultado de un plan humano. Por eso es obvio que Dios no podía bendecir esa relación. Así que escogió a Isaac, ya que ese hijo sí era el fruto de una sana relación. Además, Ismael era el hijo de una esclava, e Isaac era hijo de una mujer libre. Además, con el tiempo fue demostrado que Isaac fue mejor hombre que Isamel. Es por eso que Dios escogió a Isaac y no a Ismael.

Así que Pablo, anticipándose a esa objeción trae otro ejemplo que ilustra de manera más clara y enfática la soberanía de Dios en la elección. Dirije nuestra atención al caso de Esaú y Jacob, versos del 10 al 13.
"Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama), se le dijo: El mayor servirá al menor. Como está escrito: A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí."

Ahora, pensemos un poco. Dios escogió a Isaac, no a Ismael. Pero alguien puede decir: claro, Dios escogió a Isaac y no a Ismael por sus orígenes y por sus carácteres. Pablo puede decir: Está bien, ese es tu argumento, ahora te preguntaré bajo ese mismo argumento, ¿por qué Dios escogió a Jacob antes que a Esaú? Tenían el mismo padre, la misma madre, tenían el mismo trasfondo hereditario, eran gemelos. Sin embargo, Pablo escribe que antes de hacer algo, antes de haber obrado bien o mal, Dios escogió a Jacob.

Quiero hacer una pausa aquí, y aclarar algo muy importante. Recuerden que estamos hablando de criaturas caídas, que tanto Ismael como Isaac, tanto Jacob como Esaú fueron concebidos en pecado, como todos los hombres somos concebidos en pecado según Salmo 51:5. En otras palabras, por la caída de Adán todos somos nacidos en pecado, con una naturaleza depravada, enemigos de Dios, y estando bajo la ira de Dios. Pablo no estaba diciendo que Jacob y Esaú eran inocentes, como la iglesia católica lo enseña. Pablo no está contradiciendo aquí en Romanos 9 lo que él enseñó en Romanos 5, que en Adán todos han pecado. Lo que está diciendo aquí es que, hasta ese momento ninguno de los dos habían cometido obras personales de bien o mal, como para diferenciarse el uno del otro; ambos eran pecadores ante Dios. Sin embrago, antes que ellos salieran del vientre de su madre, ¿qué hizo Dios?, Él dijo: "El mayor servirá al menor... A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí" Dios puso su amor especial, su gracia salvífica sobre Jacob, mientras que Esaú siguió siendo el objeto de su santa ira.

Dios no puede permitir que alguien suba a su Trono y le acuse de injusticia, Dios pudo haber dicho: A Jacob aborrecí y a Esaú aborrecí. Ya que ambos, por naturaleza, merecían la ira de Dios. Pero Dios, en el ejercicio de su soberana gracia, escogió colocar su amor especial sobre Jacob, y no sobre Esaú. Y a pesar de eso, Él sigue siendo justísimo, sapientísimo y santísimo.
Esto no niega que Dios tenga una benevolencia general sobre todos los hombres caídos. Pero la Biblia también nos enseña que, aquellos que están fuera de Cristo, están bajo la ira santa de Dios; y los que son de su pueblo son objetos de su amor especial y salvación.

Pablo, luego de dar dos ilustraciones de la soberanía de Dios en la elección, procede a manfestar la base de esta elección soberana confirmada.
¿Cuál fue la base o la razón por la cual Dios aborreció a Esaú y amó a Jacob? ¿Cuál fue la base por la cual Dios escogió para salvación a Jacob y dejó a Esaú como depositario de su ira para siempre? ¿Por qué algunos son hijos de la promesa y herederos de la salvación prometida a Abraham, y otros no?
La respuesta está en el verso 11. Noten primero que Pablo aclara cuál NO fue la razón o la base de esta elección: (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama) Dios no escogió porque uno hizo el bien y el otro el mal, o porque Él vio de antemano que Jacob iba a ser bueno y Esaú iba a ser malo. ¡No!, el apóstol Pablo, claramente, repudia esa noción. Entoces, ¿cuál fue la base, cuál fue la razón?, ¿basado en qué hizo Dios una distinción entre estos dos hombres? La encontramos en una frase pequeña en medio de este mismo verso. Dice: "Para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese"
Eso es, lo que en el griego se le llama: una cláusula de propósito. "Para que", o "por razón que". Esta es la razón: Para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese.

Pablo nos está diciendo que Dios escogió a Jacob y desechó a Esaú según Su propósito conforme a Su elección, el cual fue expresado mientras ellos aún estaban en el vientre. La respuesta de esta elección no está en Jacob o en Esaú, sino en el Secreto de Su soberanía.

Hermanos, si esto no está claro, no sé qué más puede serlo. Pablo dice, claramente, que la razón de la promesa de Dios a Abraham, en referencia a la salvación de su pueblo, no ha sido frustrada por la incredulidad de los israelitas; y que el propósito de Dios siempre ha sido, no salvar a los hijos según la carne, sino a los hijos de la promesa; y éstos son hechos hijos de la promesa, no según obras presentes u obras futuras vistas de antemano; sino según el propósito de Dios conforme a la elección. Esa es la enseñanza de los versículos del 6 al 13.

Pablo sabía que las personas podían sentirse incómodas al estudiar estas doctrinas, y que algunas preguntas se levantarían en la mente. Por eso Pablo anticipa preguntas y objeciones, y las responde para dar claridad a esta enseñanza.

En la próxima publicación continuaré con las demás objeciones que Pablo adelanta en los versos posteriores en contra de la elección soberana.